Inmensamente agradecido
Iglesia De Cristo Mundo:
Carlos: Mi nombre es Carlos Mateu. Yo soy de Barcelona, España. Trabajaba mi padre y mi madre. Nosotros estábamos la mayoría de tiempo solos también después del colegio, la pobreza que abundaba en nuestra casa, pues económicamente era menos-cero. Y sabíamos. Si no había es porque no se podía, no porque no se quería y lo hemos valorado.
Carlos: Bueno, los valores que nos han inculcado siempre nuestros padres es siempre la verdad por delante. Ser muy honesto y con la verdad por delante. Nunca pierdes. Mi religión anterior era Iglesia Católica. No, no practicábamos nunca la religión católica nunca. En el colegio, cierto que era obligatorio y tenías que asistir y había una severidad muy grande si tú te negabas a seguir con la religión católica. O sea, era obligatorio. Todas las fiestas católicas la celebrábamos y nos hacían cantar y asistir. Incluso he llegado a ser monaguillo por obligación. A mí me hicieron católico, pero yo nunca practicaba el catolicismo, ni mi familia tampoco.
Carlos: Y la fe, pues yo he tenido la desgracia de estar casado por primera vez, donde ha sido verdaderamente un horror en mi matrimonio. Entré en la depresión cuando descubrí ciertas cosas que, bueno, me derrumbé totalmente en mi vida, llegué a pensar a suicidarme también. Pues la depresión, donde perdí 20, más de 20 kilos y quedé muy mal, es cuando el hermano me invitó para venir a la Iglesia.
Carlos: La primera vez cuando escuché de la Iglesia De Cristo es cuando un hermano me invitó a un evento de la Iglesia. Era un Unity Games, donde recibí, pues, cordialmente una amabilidad de todos los hermanos que me impactó mucho y me invitaron a seguir a escuchar los servicios de adoración en la semana siguiente y acudí y es la primera vez que escuché las palabras de la Iglesia De Cristo.
Carlos: Me quedé asombrado por el orden que había, sobre todo mucho orden. La separación me quedó impactado porque las mujeres aquí, los hombres aquí. Pero bueno, se me explicó posteriormente en las doctrinas el por qué siempre hay un por qué. Y también valoro mucho pues, que el servicio de adoración sea unificado para todo el mundo. O sea, no cada uno, porque al fin y al cabo, cuando ibas a la Católica y vas a escuchar la Iglesia y hablaban del tiempo o de lo que le parecía a él, entonces lo veo más adecuado.
Carlos: Me sorprendía cada vez que escuchaba una. O sea, aprendía una cosa nueva y me entraba, o sea, me entraba, no es lo otro que te obligaban lo hacía voluntariamente y gozaba con eso. O sea, estaba esperando la doctrina. Tuve la gran fortuna de que el que me enseñó las doctrinas lo hacía muy claro y lo repetía hasta que lo entendía perfectamente. No tenía ningún problema en repetir tantas veces como fueran necesarias.
Carlos: Eso sí, lo comprobaba porque todas las preguntas y todo lo que él me enseñaba, las doctrinas. Yo por supuesto lo iba apuntando y luego como mi madre era muy devota, la iglesia, las Biblias siempre estaban en casa y lo comprobaba. Efectivamente coincidía todo. Entonces no hay duda. Yo fui bautizado en la Iglesia De Cristo en el 2008.
Carlos: Al entrar en la iglesia, pues claro, me cambió la vida porque yo no salía, no comía y allí me vi muy, muy libre. Y la amabilidad de todos los hermanos me ayudaron mucho en mi vida. La diferencia que vivía fuera de Iglesia antiguamente, antes de pertenecer, pues yo sí tenía muchos vicios, muchos. Nunca he bebido, por cierto, nunca. Pero sí que tenía vicios de juego y de salir y no respetar muchas cosas. O sea, era un poquito bala perdida, pero gracias a Dios todo se ha solucionado. Pero la experiencia me ha enseñado sobre lo que he escuchado que estoy en la verdadera Iglesia, porque yo soy de ideas fijas. Si he tenido que cambiar en mi vida he cambiado. Pero siempre hay una razón y lo que he escuchado me ha convencido totalmente. Entonces pertenezco por esto.
Carlos: Yo ahora estoy jubilado, Estoy felizmente casado. Gracias al Señor Dios he podido rehacer mi vida. Es estar inmensamente agradecido a Él porque estaba hundido dentro de un pozo muy grande. Yo en mi depresión. Tengo que estar inmensamente agradecido al Señor Dios. Me ha concedido una una muy buena mujer donde el Señor Dios nos ha concedido tener una niña que es fenomenal, y yo soy un diácono principal, 4.º diácono de la Iglesia De Cristo. Y estoy súper feliz.
Carlos: Estoy totalmente convencido, puesto que tengo más cosas que hablar y la experiencia me ha enseñado que siempre hay un motivo y estoy totalmente de acuerdo, que ha sido el motivo que el Señor Dios ha consentido que pasara lo que ha pasado en mi vida para que yo pudiera entrar y el escoger. Porque entramos, porque Él quiere, no porque nosotros queremos.
Carlos: Por supuesto, me ha dado mucha inspiración. Yo constantemente, cada día hablo de la Iglesia, con mis amigos, conocidos, la mayoría son ateos, la verdad sea dicha, pero entablamos conversaciones de cómo es una, qué es lo otro, que qué hacemos aquí, que hacen allí, que tiene que pensar la la verdad de lo que le explico yo dentro de mis posibilidades. Entonces les invito que puedan preguntarle al ministro directamente, pero cada día yo hago mi propagación. Ser miembro de la Iglesia De Cristo es un motivo muy grande para poder celebrar de que tú perteneces a ella. No todo el mundo es afortunado en poder seguirlos. Por eso soy muy afortunado en poder pertenecer a esto y poder seguir hasta el final de mi vida.